martes, febrero 13, 2007

L’amor té ulls verds

Sergio Manganelli

Por ella
guarda luto el adjetivo
y besan como Judas los pronombres.

Sus labios son bandera,
cáliz de sangre presa
para esta patria en celo y esta fe tan pagana.

Por ella
se amortaja lo probable,
o vive a pan y agua la alegría.

Enmudece el silencio en los excesos,
y al sur de la quimera
desmadeja la muerte su capricho.

Por ella
hallé el vértice feliz y el desamparo,
la lluvia del desierto, el bar de las primicias.

De espaldas a su ausencia duerme la madrugada,
en sábanas sin vuelo
de verbos oprimidos.

Por ella
la inquietud, la sombra, el devenir,
el cabernet, la luz , el desvarío.

El cuerpo enciende su espejo y su toreo,
la tinta su premura
el Hotel Carlton todas las farolas.

Por ella
los puentes -igual que los de Madison-
son amargas ventanas que dan a ningún lado.

La soledad es una puta sombría
que cobra con prisa los recuerdos.

Por ella
la vida siempre es vida,
el amor un boquete, el pecho un asesino.

Y la pena un gusano
que devora sin pausas
esa manzana agria del olvido.

Por ella
el juglar va a la musa,
la angustia al apetito, el sexo a su guarida.

Su canto de sirena agita cicatrices
y se ahoga en el gentío
la que viene por mí.

Por ella
rechazo las piedades, me niego al débito del mal hospitalario,
no pago al desamor y a las usuras.

Juntos celebramos el rastro del otoño,
las barcarolas ebrias,
el cielo clandestino.

Por ella
cada noche dejo una sed vigía,
por si al deseo le quitan el seguro y se viene conmigo.

Me agobia el detalle arbitrario,
la porfía de no rendirme
al oficio feliz de estar equivocado.

Por ella
los tranvías dan viajes sin boleto,
y en un confín de dudas quemamos el regreso.

Empeño el excedente, el faro de anteayer,
el bolígrafo ansioso,
el mañana improbable.

Por ella
puedo escribir un poema tan tonto como este,
que le alerte el ombligo y acune una sonrisa.

Esta baraja turbia que predice su espuma,
sus playas del desvelo,
con peces moribundos
de amor insatisfecho.


Por ella, dejaron de vaciarme los pronósticos.

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